. Espinas Marchitas: Jueves

jueves, 27 de octubre de 2011

Jueves

Ardió mi corazón desesperado
en un látido ferviente y anilquilado,
junto al pensamiento de tu recuerdo
ahora borrado.

La pasión que  una noche nos
envolvió, fue tan abrazadora
como la llamarada purpurea del
volcán que formamos juntos los dos.

Y en sus letras,entre cuanteosos
besos nos parecimos al vesubio
bajo el crepúsculo de un
amanecer.

Nuestras sábanas rojizas fueron
como telones en un teatro improvizado,
entre caricias y abrazos,cubriendo
la vehemencia con la que nos
mirabamos.

Y nos atrapo el sueño al
despertar, de que juntos
jamas habriamos de estar,
fuimos ilusos como la
pira en su claridad,
volviendonos cenizas
dentro del tiempo
al pasar.

No hay comentarios:

Publicar un comentario