Una vez caí, y mire el cielo desde lo bajo...
En la tierra, que se me hacia muy cercana,
senti el latir del mundo con el exalar de
mi cuerpo mudo...
Y con mis manos, podia,lentamente,
acariciar el suave rocio que en las
mañanas, habria de llenar el corazón
de alguna flor.
Perdi mis ojos , e imaginación...en las
nubes blancas de la mente, que lejos
de mi lavaban, penas ocurridas,en
alguna que otra ocasión...
Mientras la luna se hacia presente, al altar del día
con un ramillete de estrellas entre los brazos
y mil versos, que ,de antemano yacian preparados...
Sin aviso , sin razón
Bese,por primera vez,
la lluvia lenta y triste.
Y en su verso burdo, canto,
con dotes de silencio,tu eres mi amor...
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